Los vehículos de armamento usarán una nueva tecnología conocida como “e-camouflage” que utilizará una forma de “tinta electrónica” para hacer que el vehículo sea “invisible” por medio de unos sensores electrónicos altamente sofisticados adaptados al casco del vehículo que proyectarán imágenes del medio ambiente que lo rodea hacia la afuera del vehículo permitiéndole mezclarse con el paisaje y evadir el ataque.

El camuflaje electrónico le permitirá al vehículo perderse en el paisaje que lo rodea más o menos de la misma forma que lo hace uno pulpo, ya que a diferencia de las formas convencionales de camuflaje, las imágenes en el casco cambiarán de acuerdo con el ambiente cambiantes siempre asegurando que el vehículo permanezca oculto aún cuando esté en movimiento.

Hasta recientemente, tales conceptos solo parecían cosa de ciencia ficción, pero los científicos en la compañía de defensa BAE Systems esperan que muy pronto la “invisibilidad” en el campo de batalla sea una realidad científica y tecnológica.

Los científicos de la BAE esperan que esta nueva tecnología de camuflaje electrónico esté disponible para utilizarse con la Armada Británica que pelea en el Sureste de Afganistán y en conflictos futuros.

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