Marie Marot habla francés, pero la enorme sonrisa no requiere traducción.

Veredicto de no culpable

Veredicto de no culpable

“¿Ven eso? Esa es una sonrisa de un millón de dólares”, dijo el abogado de Marot, Don Brewer, en las afueras de una corte en el Condado de Kane en Chicago, Illinois en los Estados Unidos, donde un jurado encontró a Marot como NO culpable después de pasarse un semáforo en rojo y provocar un accidente fatal en una intersección en Elgin en 2007.

Marot, de 24 años de edad y quien pertenece a la orden de la Fraternite Notre Dame, iba manejando una camioneta tipo van hacia su convento en Chicago a eso de las 12:15 a.m. el 7 de Octubre de 2007, cuando se estrelló contra un Honda Civic que llevaba a cuatro adolecentes en la intersección de Illionis Highway 72 y Randall Road. Uno de los pasajeros del Honda, Keith Forbes de solo 16 años de edad y originario de Carpentersville, murio a causa del terrible choque que provocó la hermana Marot.

Las autoridades acusarona Marot de pasarse un semáforo en rojo mientras manejaba hacia el Sur en Randall. Pero la hermana, quien había estado trabajando antes del accidente en la panadería Algonquin que es manejada por su orden, argumentó que el semáforo estaba en verde.

Los jueces deliberaron por unos 30 minutos antes de llegar a su veredicto en el juicio de dos días, y salieron de la corte sin hacer ningún comentario. Los fiscales tampoco quisieron hacer comentarios.

La madre superior de Marot, la Madre Marie Martha, aplaudió la decisión. Cerca de 20 monjas de la Fraternite Notre Dame asistieron al juicio.

“Solo agradecemos a Dios, y estamos felices de que la verdad saliera a la luz”, dijo Marie Martha.

Los jurados no escucharon el testimonio sobre la muerte de Forbe porque el Juez Ron Matekaitis decidió que podría predisponer el juicio. Marot no fue culpada de la muerte de Forbe.

La monja asesina y sus secuaces

La monja asesina y sus secuaces

A pesar de las objeciones de los fiscales, Matekaitis permitió a Marot vestir su hábito durante el juicio. Ella no testificó y sus abogados no llamaron a ningún testigo, decidiendo atacar la credibilidad de todos los testigos de la fiscalía. Al cerrar su argumento, Brewer incluso acusó a la conductora del Honda Civic, Alexis Peña, de 18 años de edad y originaria de East Dunde, de mentir.

Peña testificó que ella estaba completamente segura que ella tenía el derecho de paso mientras manejaba hacia el oeste en Illinois 72 para dejar a una amiga en su casa. Esa amiga, Jameson Sánchez, testificó que el semáforo estaba en verde para ellas.

Pero Brewer dijo que las adolescentes se pasaron el semáforo en rojo y que luego culparon a Marot.

“Ella se pasó la luz roja”, dijo Brewer de Peña, quien solo movió su cabeza en desacuerdo mientras se sentaba en la corte con su madre.

Otro automovilista, Miguel Realzolade Crystal Lake, testificó que la camioneta de Marot iba frente a él a unos seis largos de carro de distancia mientras se acercaban al semáforo en rojo. Dijo que la monja ni siquiera disminuyó la velocidad de su camioneta mientras cruzaba la intersección y se estrelló contra el Civic.

Pero Brewer atacó la credibilidad de Realzola diciendo que el testigo hizo un trato con los fiscales sobre multas de tráfico pendientes y un cargo por un delito menor. Realzola y los fiscales negaron que hubiera tal trato.

“No creo que pueda creérsele”, dijo Brewer al jurado sobre Realzola.

No se hizo justicia

No se hizo justicia


Alexis Peña (izquierda) y su tía, Jennifer Calendo, se abrazan mientras que la madre de Keith Forbes (vestida de blanco) trata de calmar a las personas que fueron a apoyarla luego de enterarse de la noticia de que la Hermana Marie Marot fue encontrada inocente.

Si Marot hubiera sido encontrada culpable de la violación de tráfico, hubiera encarado una multa. El veredicto hubiera tenido implicaciones en demandas civiles hechas contra Marot por Peña, otra pasajera, y la familia de Forbes.

“Es un gran estímulo para la defensa en el caso civil”, dijo Brewer.

La orden de Marot es un grupo “Católico tradicional” pero no está afiliado con la Iglesia Católica Romana.