Una lluvia de meteoritos pudo contribuir al enfriamiento de la Tierra que provocó extinciones masivas entre los seres vivos, según sugiere un estudio de la Universidad de Oregón en Eugene (Estados Unidos) que se publica en la revista ‘Science’.

EUROPA PRESS La dispersión de partículas de diamante, un signo clave de un impacto extraterrestre, a lo largo de una capa de sedimentos en Norteamérica sugiere que el inicio del episodio de enfriamiento rápido denominado ‘Younger Dryas’ podría haber sido más complejo de lo que pensaban los investigadores.

La mayoría de los científicos piensa que el episodio denominado ‘Younger Dryas’, que se produjo hace entre 12.900 y 11.600 años, se desencadenó internamente por otros cambios en el sistema climático de la Tierra.

Los investigadores, dirigidos por Douglas Kennett, han descubierto nanodiamantes en sedimentos en Norteamérica que marcan el inicio del ‘Younger Dryas’. La única explicación obvia para esta concentración es que se crearan en un ambiente con mucha energía de un impacto producido por un cometa u otro objeto extraterrestre.

Los autores proponen que una multitud de cometas de meteoritos produjo múltiples explosiones aéreas, similares a las explosiones asociadas con el impacto del Tunguska en 1908. Estos meteoritos podrían haber impactado en la superficie de la Tierra y contribuir con estos impactos a la desaparición de los grandes mamíferos y de los humanos de la cultura prehistórica de Clovis.

Fuente:

http://www.diarioinformacion.com/secciones/noticia.jsp?pRef=2009010200_30_836852__Ciencia-lluvia-meteoritos-pudo-contribuir-enfriamiento-Tierra-provoco-extinciones-masivas.

La presencia de pequeños diamantes en el suelo son una prueba firme de la explosión de un cometa sobre América del Norte hace unos 13.000 años, que causó la extinción de numerosas especies animales, señala un artículo publicado hoy por la revista Nature.

El artículo indica asimismo que el cataclismo redujo la población humana de los primeros habitantes de la región e inició un período de fríos que se extendió durante unos 1.300 años por todo el planeta.

El calor generado por el impacto del objeto extraterrestre probablemente derritió gran parte de un glaciar que cubría la región de los Grandes Lagos y causó una enorme inundación a lo largo del curso del Río Misisipi, según esta teoría.

El geólogo James Kennett, de la Universidad de California en Santa Bárbara, quien primero expuso esta teoría en 2005, sostiene que las pruebas del impacto se encuentran en una fina capa de sedimentos que se extiende en toda América del Norte.

“Hay materiales con características químicas particulares en esa capa que proporcionan, en conjunto, pruebas muy firmes de que la capa es resultado de este impacto extraterritorial”, aseguró Kennett.

Los científicos señalan que esa capa, que data de unos 12.900 años, contiene pequeñas esferas de carbono y metales, trozos de diamantes y concentraciones extraterrestres de helio 3 y el elemento iridio.

Según el informe, las olas frías provenientes del glaciar que llegaron al Golfo de México cambiaron las corrientes del océano Atlántico y modificaron las pautas del clima en todo el planeta durante el período conocido como el “evento de Drías joven”.

Fuente:

http://www.soitu.es/soitu/2009/01/02/info/1230925691_236032.html