Aquellos que tengan interés en las leyendas urbanas seguramente conocerán la historia de las agujas infectadas con VIH dejadas en el cine para contagiar a espectadores incautos. Es un verdadero clásico, y como tal uno debería contestar en automático que es una mentira. Pero la cadena sigue circulando. Hela aquí.

CUIDADO
REVISEN SU SILLA POR FAVOR
CUANDO VAN AL CINE

Un incidente ocurrió cuando una amiga de un trabajador de Femsa, fue al cine y se sentó en una silla, ella sintió que algo la estaba pinchando

Paréntesis: ¿verdad que la precisión hueca es adorable? No sé si en los cursos de inducción les digan otra cosa, pero los empleados de Femsa no fueron paridos por Dios como para que nunca les pase nada malo. Ese dato sería inútil si no aportara un posible origen de esta variante, que debe podría ser el hogar de Femsa, o sea Monterrey.

Se levanto para ver que había sido y vio una aguja con una nota adjunta que decía ‘Bienvenida al mundo real, ya eres VIH Positivo’
Efectivamente, al ir al doctor le hicieron un análisis a la aguja y resulto VIH Positivo.

Para que el virus se refleje en un examen de sangre puede ser necesario que pasen hasta seis meses después de ser infectado.!!!!!
La mayoría de nosotros solo nos aventamos al asiento. POR FAVOR REVISE SU ASIENTO!!!!!!

La forma mas segura de hacerlo NO ES PALPANDO CON SU MANO a ver si siente la aguja, al menos mueva el asiento varias veces para ver si hay algo

FIJESE MUY BIEN.

También en los teléfonos públicos consumidores de drogas están poniendo agujas usadas en el orificio donde recibes el cambio para que las personas, al buscar el cambio o ver si alguien a dejado algo, sean infectadas con HEPATITITIS B, SIDA Y OTRAS ENFERMEDADES.

Otro paréntesis: ¡Santísimo Niñito Dios! ¡Me puedo enfermar de HEPATITITIS! La neta me da mucho más miedo enfermarme de “hepatititis” que de hepatitis. Perdón, es que no me pude aguantar.

Este mensaje debe ser enviado a todo el mundo para que se mantengan alejados del peligro. SEA CAUTO!!!!!!

Esta información fue suministrada por los empleados de Teléfonos de México por medio del instructor y fue enviada por correo electrónico a todos los empleados de la policía metropolitana.
Este mensaje es un servicio social, coopere con su distribución y CUIDENSE

Ayudanos a Ayudar’!POR FAVOR NO LO BORRES REENVIALO,, A TODOS TUS CONTACTOS DE LOS MEDIOS DE MESSENGER QUE USES ¿RECUERDA ES MEJOR PREVENIR QUE LAMENTAR?

GRACIAS POR TU AYUDA,.,.,.

No hace mucho César de la Luz la recibió y se pitorreó de ella como es debido, así que primero lo mando para allá. Yo espero.

Bienvenido de nuevo. Si le puso atención a César, habrá notado que el gran problema con la cadena es que los supuestos sitios de riesgo ya no existen. La versión que recibió César dice que ocurrió en Cinépolis, y la última vez que pisé un Cinépolis (hace como dos meses) los asientos eran plegables y uno forzosamente tiene que bajar el asiento en sí lejos del respaldo para poder sentarse. No es una butaca que facilite sembrar jeringas o notas. Además, como dice César, los empleados (dizque) pasan la escoba entre funciones.

Mucho más anacrónica resulta la mención a teléfonos de monedas, que son prácticamente inexistentes en el país, desplazados por las casetas de tarjeta electrónica montadas precisamente por Telmex, que a su vez serían desplazadas por los teléfonos celulares. En la actualidad, Telmex ya no hace ni administra teléfonos de monedas y no debería haber un solo instructor que imparta algún tema sobre teléfonos de monedas.

Mi versión tenía algo que la de César no tenía: firmas. O mejor dicho, intentos de firma.

MARTHA E. CAMACHO GOMEZ
DIRECCION DE DIFUSION CULTURAL
TEL. 5151 ****,
FAX 5333 ** **
SUSANA JAIME MUÑIZ
INSTITUTO TECNOLOGICO Y DE ESTUDIOS SUPERIORES DE MONTERREY
EUGENIO GARZA ZADA
DEPTO DE BECAS
Diego Del Angel sistemas

En ese fárrago sin pies ni cabeza se distinguen al menos tres personas que supuestamente avalarían la cadena. Ninguna tiene relación directa con Femsa o Telmex. Los números de teléfono y fax no se parecen en nada a los teléfonos de los campi del Tec de Monterrey en Tlalpan y Atizapán, los sospechosos más obvios por el formato del número. Tampoco es creíble que una persona con una posición administrativa elevada dentro del Tec de Monterrey no sepa escribir correctamente el nombre del fundador de dicha institución, Eugenio Garza Sada. Sólo los muy ingenuos se irían con la finta.

Historia de la cadena

Esta cadena en realidad son dos cadenas fusionadas. La historia de las agujas en las butacas del cine y la historia de las agujas en los teléfonos corrían cada una por separado al menos desde 1998. Al parecer la fusión ocurrió poco tiempo después, porque al año siguiente ya circulaba una versión muy parecida a la presentada aquí en Argentina y Uruguay. Encarnaciones más recientes del meme de la aguja infectada con VIH ocurren en clubes nocturnos, dispensadores de gasolina y máquinas expendedoras de refresco.

El meme de la jeringa infectada del cine puede ser el más antiguo y el antecedente directo de las versiones más recientes con teléfonos y gasolineras. Toma muchos elementos de la leyenda urbana de “AIDS Mary”, inventada durante la década de 1980, sobre una mujer con SIDA que seducía hombres para infectarlos en venganza por haber sido contagiada. Otro posible antecedente es la histeria de los Hombres de las Agujas en la Nueva Orleans de 1930, que supuestamente acechaban a las jóvenes negras en los cines para inyectarles morfina, secuestrarlas y venderlas como esclavas, o bien a cualquier mujer para matarlas y venderlas a las escuelas médicas como cadáveres para disección.

El peligro de las cadenas

Seguro no le sorprenderá saber que jamás se ha detectado un montaje sistemático de agujas infectadas en lugares públicos. Lo que sí se ha documentado son actos de vandalismo y bromas pesadas que replican algunos elementos de la cadena:

Ni una sola de las víctimas se ha infectado con VIH u otra enfermedad.

Es revelador que ningún incidente de jeringas hipodérmicas en lugares públicos ocurrió antes de la difusión de la cadena, y hay evidencia circunstancial de que el caso de Virginia fue inspirado por la cadena. De este modo se crea un proceso cíclico en el que las cadenas alertando de jeringas abandonadas inspiran a los vagos a recrear esa leyenda urbana, que ahora se vuelve realidad y aumenta la credibilidad de la leyenda original, que se hace más susceptible de ser pasada, leída por vagos y así hasta el infinito y más allá.

Las cadenas son malas porque llenan de basura el correo electrónico, crean histeria innecesaria e inducen decisiones y acciones equivocadas. Esta cadena me enseñó que las cadenas también son malas porque inspiran ideas nocivas en personas malas y estúpidas. Diga no a las cadenas de correo.

Más

Versiones idénticas de la cadena

Otras variantes:

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