Una investigación realizada en la Universidad de Copenhagen, en Dinamarca, precisó el origen histórico de la modificación genética que generó los ojos azules de todos los habitantes del planeta. Los científicos calculan que esta mutación evolutiva ocurrió entre 6 y 10 mil años atrás. Y de ese ancestro común descienden todos los hombre y mujeres de ojos azules de la Tierra.El trabajo se publicó en la edición de enero de la revista científica Human Genetics e implicó analizar y comparar muestras ejemplares de ADN mitocondrial proveniente de personas de variados colores de ojos provenientes de diversos países.

Originalmente, las personas tenían los ojos marrones, afirmó el Profesor Hans Eiberg del Departmento de Medicina Celular y Molecular de la Universidad. Pero una modificación genética aleatoria afectó al gene conocido como OCA2 en el cromosoma humano y se generó una especie de interruptor biológico capaz de apagar el funcionamiento de otros genes que son los responsables de generar los ojos marrones.

Justamente, el gene OCA2 es el responsable de codificar la proteína denominada P, que está directamente relacionada con la producción de melanina, el pigmento que le da su color a la piel, el pelo y también los ojos.

El switch, que se encuentra físicamente cercano en los cromosomas- al gene OCA2 es capaz de moderar la producción de proteína P que termina en el iris de cada ojo y modela su color, sin impedir su producción total. Así con menos melanina se diluye el color marrón y va apareciendo el azul.

El albinismo

De hecho, cuando esto pasa y la función del OCA2 y la producción de la melanina es totalmente silenciada, prácticamente no hay generación de este pigmento y se produce la -no tan extraña- condición denominada albinismo.

Otro detalle que destacó Eiberg es que, según su opinión, esta mutación es relativamente neutra en términos de representar mejoras o desventajas en la carrera de la supervivencia genética y en la evolución. Algo similar a lo que ocurre con ser pelado, o tener algunas manchas en la piel. Es, simplemente, el resultado de las constante mutaciones aleatorias que prueba y descarta la madre naturaleza.

Fuente: http://www.diario.com.mx/nota.php?notaid=98a1594be0204026ba82e63905317b70