NY Times / Sandra Blakeslee

Usando visores de realidad virtual, una cámara y una vara, los científicos han inducido “experiencias extra-corporales” – la sensación de flotar fuera del propio cuerpo – en personas sanas, de acuerdo a experimentos que se publicarán en la revista Science.

Científicos inducen “experiencia extra-corporal”

 NY Times / Sandra Blakeslee

Usando visores de realidad virtual, una cámara y una vara, los científicos han inducido “experiencias extra-corporales” – la sensación de flotar fuera del propio cuerpo – en personas sanas, de acuerdo a experimentos que se publicarán en la revista Science.

Cuando la gente observa una imagen creada de ellos mismos a través de los visores y son empujados en la manera correcta con la vara, sienten como si hubieran dejado su cuerpo.

El estudio revela que “la sensación de tener un cuerpo, de ser un ente corpóreo” es realmente una constucción de múltiples estímulos sensoriales, dijo Matthew Botvinick, profesor de neurociencia en la Universidad de Princeton, experto en mente y cuerpo que no estuvo involucrado en los experimentos.

Usualmente estos impulsos sensoriales, que incluyen la visión, el tacto, el equilibrio y la conciencia de la posición del cuerpo en el espacio trabajan juntos y coordinadamente, dijo el Prof. Botvinick.  Pero cuando la información que llega de las fuentes sensoriales no concuerda, cuando salen de sincronía, la sensación de ser un mismo cuerpo se desvanece.

El cerebro, que aborrece la ambigüedad, toma una decisión que puede ser, como muestra este experimento, sentir que se está en otro cuerpo.

La investigación provee una explicación física al fenómeno usualmente relacionado con influencias extra-terrenales, dijo Meter Brugger,  neurólogo en el Hospital Universitario en Zurich, Suiza.  Luego de lesiones severas y repentinas, la gente frecuentemente reporta la sensación de flotar sobre su cuerpo, viendo hacia abajo, escuchar lo que se habla y luego, súbitamente encontrarse de nuevo en su cuepo.

Esta nueva investigación es un primer paso para descubrir cómo el cerebro crea esta sensación, dijo.

[…]

En Suiza, el Dr. Olaf Blanke, neurocientífico en la Escuela Politécnica Federal en Lausanne, le pidió a un grupo de voluntarios ponerse visores de realidad virtual mientras estaban parados en un cuarto vacío.  Una cámara proyectaba una imagen de cada persona, tomada desde atrás y mostrada a una distancia de 6 pies de ellos.  Los sujetos observaron una imagen creada de ellos parados a la distancia.

Luego, el Dr. Blanke tocó a cada persona en la espalda por un minuto con una vara,  mientras se proyectaba al mismo tiempo la imagen de la vara en la imagen “ilusoria” de la persona

Cuando los toques estaban en sincronía, la gente reportaba la sensación de estar momentáneamente dentro del cuerpo “ilusorio”, cuando no eran sincronizados, la sensación no se presentaba.

En otra variación, el Dr. Blanke proyectaba un “cuerpo de plástico” – un maniquí vestido en las mismas ropas del sujeto – en los lentes de realidad virtual.  Con toques sincronizados de la vara, las sensaciones corporales de la persona se desviaban hacia la imagen del maniquí.

Otro grupo de experimentos fueron realizados por el Dr. Hendrik Ehrsson, profesor de neurociencia en el Instituto Karolinska de Helsinki.

El año pasado, cuando el Dr. Ehrsson era, según dice “un estudiante de medicina aburrido en el University College de Londres”, se preguntó “¿qué pasaría si te ‘sacaras’ los ojos y los pusieras en una parte diferente de la habitación?  ¿Te verías a ti mismo desde donde están tus ojos o desde donde se encuentra tu cuerpo?”.

Para averiguarlo, el Dr. Ehrsson solicitó a un grupo de voluntarios que se sentaran en una silla, usando visores conectados a dos videocámaras situadas 6 pies detrás de ellos.  La cámara izquierda proyectaba al ojo izquierdo y la cámara derecha al derecho.  Como resultado, la gente venía sus propias espaldas desde la perspectiva de una persona virtual sentada detrás de ellos.

Usando dos varas, el Dr. Ehrsson tocó el pecho de cada persona por dos minutos con una vara, mientras movía la segunda vara justo debajo de las cámaras – como si tocaran el cuerpo virtual.

De nuevo, cuando los toques eran sincronizados la gente reportaba la sensación de estar fuera de sus propios cuerpos – en este caso, viéndose a sí mismos desde la distancia donde sus “ojos” estaban colocados.

Luego, el Dr. Ehrsson tomó un martillo.  Mientras la gente experimentaba la ilusión, pretendía golpear el cuerpo virtual agitando el martillo justo debajo de las cámaras.  Inmediatamente los sujetos registraron una respuesta ante la amenaza, según lo midieron los sensores en su piel: se detectó sudoración y aceleración del pulso.

También reaccionaron emocionalmente, como si se estuvieran viendo a sí mismos ser lastimados, dijo el Dr. Ehrsson.

Los participantes en los experimentos dijeron que sintieron una sensación de vagar fuera de sus cuerpos, pero no una fuerte sensación de flotar o girar, como es común en las llamadas “experiencias extra-corporales”, dijeron los investigadores.

El próximo grupo de experimentos incluirá separar no sólo tacto y visión sino otros aspectos de la sensación de corporeidad, como la conciencia de la posición del cuerpo en el espacio y el equilibrio, dijeron.

Estos desajustes tienden a ocurrir naturalmente cuando regiones multi sensoriales del cerebro son privadas de oxígeno después de una lesión o trauma.  O bien, pueden ser inducidos durante parálisis del sueño, ejecución de deportes extremos o prácticas de meditación que alteran el flujo de sangre a regiones específicas del cerebro.

http://www.nytimes.com/2007/08/23/science/23cnd-body.html?ex=1345521600&en=d0a606a987e89aa1&ei=5088&partner=rssnyt&emc=rss

(traducción I. López)