Carlos Trejo se ha convertido en el gurú mexicano de los fantasmas. Sus supuestas investigaciones aparecen con frecuencia en todos los programas de variedades que desean tener cada vez más raiting. Hoy por hoy, la población mexicana tiene la idea de que si se presenta algún fenómeno paranormal en cualquier lugar, el señor Trejo es sin lugar a dudas el “investigador” indicado para desentrañar los secretos de lo sobrenatural.

   La primera vez que escuché sobre este señor fue en la preparatoria. En esos tiempos, me gustaba platicar con la bibliotecaria de mi escuela acerca de todo tipo de libros relativos a lo paranormal. En una de esas, me enseñó un libro llamado Cañitas. El autor era supuestamente un investigador que llevaba a cabo estudios sobre el fenómeno de las casas embrujadas. Ahí fue cuando empecé a encontrar este pequeño texto tanto en librerías como en el comercio informal.

   Nunca he leído el libro ni su supuesta continuación, Casas embrujadas, pero lo que me ha tocado averiguar por parte de algunos críticos literarios es que Cañitas es un libro pésimamente escrito: la calidad literaria es inexistente y tal parece que el pequeño texto ha sido escrito por un niño de preescolar. Esto no sucede con el segundo libro: esta vez la editorial se ha encargado de asesorar al señor Trejo con un corrector de estilo para que aquella penosa escritura no se vuelva a presentar.

   Ahora bien ¿cuál es mi opinión sobre Carlos Trejo? Mi punto de vista como futuro científico es que este señor lo único que hace es decir mentiras, cosas sin sentido o simple y llanamente deformar la ciencia a su antojo para convencer al público de que existe una tremenda actividad paranormal. Si el público se acercara a la comunidad científica y buscara tener una cultura científica adecuada, descubriría que no hay la menor evidencia que confirme la existencia de toda esa gama de fenómenos sobrenaturales que tanto divulgan los supuestos cazafantasmas.

CARLOS TREJO

   ¿Es verdad el pleito entre Carlos Trejo y Jaime Maussán? ¿Cuánta realidad hay entre la bronca personal televisiva entre Trejo y su hermana, la seudo investigadora Norma Trejo? He visto que los dimes y diretes entre estas personas se dan a cada rato en televisión. ¿No será acaso un simple truco para atraer más público? Si bien hemos visto que los programas de chismes como La Oreja o Ventaneando tienen altos niveles de audiencia cuando ofrecen al público broncas entre artistas, ¿no estarán usando Maussán y los hermanos Trejo la misma estrategia para atraer cada vez a más crédulos?

   Para finalizar, hay que ser muy claros: este señor no es investigador ni científico: nunca ha ofrecido sus pruebas a la comunidad científica y aparece solamente en programas de variedades y/o entretenimiento mostrando sus supuestas evidencias. Vídeos de sombras o fotografías ambiguas de supuestos fantasmas que bien han podido ser trucadas no sirven como prueba a la hora de demostrar que hay actividad paranormal en el mundo. Mientras el señor Trejo no se acerque a la comunidad científica con verdaderas pruebas, no podemos aceptar sus casos de fantasmas, y mientras los televidentes y lectores que siguen a este charlatán tanto en televisión como en las revistas populacheras no posean una cultura científica apropiada ni la habilidad para analizar las cosas de manera crítica y escéptica, seguirán siendo engañados permanentemente.