SAN DIEGO (AP) – La diócesis católica de San Diego se declaró en bancarrota para evitar los juicios alentados por al menos 140 demandas por presunto abuso sexual de sacerdotes.La solicitud de protección bajo las leyes de bancarrota fue presentada ante la corte federal de quiebras en la noche del martes, unas horas antes de que comenzara el primer juicio en un tribunal de San Diego. Las peticiones de protección amparadas en el Capítulo 11 suspenden automáticamente los procedimientos judiciales.

En una carta colocada en el portal de la internet de la diócesis, el obispo Robert Brom dijo que la diócesis tomó la decisión porque "los primeros fallos de juicios en favor de algunas víctimas podrían mermar los recursos de la diócesis y de seguros de manera que no quedaría nada para otras víctimas".

En su pedido de quiebra, la diócesis dijo que tenía 95,7 millones de dólares en propiedades y otros 60,4 millones de dólares en activos líquidos, incluyendo acciones, bonos y cuentas operativas.

La diócesis de San Diego es la quinta en Estados Unidos que recurre a la protección de bancarrota al verse presionada por una serie de demandas por presuntos abusos sexuales. Con casi un millón de fieles, es la más grande del país.

Los funcionarios de la diócesis y los abogados de los demandantes no pudieron llegar a un acuerdo durante dos días de negociaciones que terminaron el lunes en un tribunal de Los Angeles.

La diócesis llamó a los abogados de los demandantes el martes en la mañana para realizarles una oferta "final y mejor", dijo Micheal Webb, abogado de la diócesis. Se negó a detallar cuánto dinero había ofrecido la Iglesia, pero dijo que el monto era mayor al de otros acuerdos alcanzados en otras diócesis del país.

"Cuando lo rechazaron, no nos quedó otra opción", expresó Webb.

Los abogados de los demandantes dijeron que la cantidad de dinero que la Iglesia les ofreció no era suficiente porque la diócesis tenía más demandas que otras jurisdicciones.

Acusaron también a la Iglesia de presentar la solicitud de quiebra para mantener bajo secreto información embarazosa.

"Durante tres años, le dijeron a la gente que querían llegar a un acuerdo, que querían ser transparentes", expresó John Manly, abogado de un demandante cuya demanda irá a juicio en abril. "Pero cuando quedó en claro que la verdad saldría a luz a través de un jurado investigador, buscaron impedir que las víctimas fueran compensadas y se conociera la verdad".

En su presentación, la diócesis no menciona los nombres de los litigantes que presentaron demandas de abuso sexual. Dijo que había pedido incluir esos detalles en un documento lacrado.

El juicio cuyo comienzo había sido previsto para el miércoles surgió por las acusaciones de una mujer de que un sacerdote la obligó a mantener relaciones sexuales en su oficina parroquial en 1972, cuando ella tenía 17 años.

Se preveían otros tres juicios más adelante de numerosas víctimas que alegan que la diócesis protegió a los sacerdotes que cometieron abusos sexuales, trasladándolos de parroquia en parroquia.

La diócesis tiene 98 iglesias y 50 colegios.

Las otras diócesis que han solicitado la protección de la quiebra son las de Davenport, Iowa; Portland, Oregón; Spokane, Washington; y Tucson.

Fuente:

http://mx.news.yahoo.com/s/ap/070228/eeuu/amn_gen_eeuu_diocesis_bancarrota