Gobiernos, organizaciones religiosas y ciudadanos musulmanes de todo el mundo han reaccionado al discurso pronunciado por Benedicto XVI en el que condenaba la "irracionalidad" de "la difusión de la fe mediante la violencia" de la ‘yijad’ (guerra santa) del islam.

La aclaración hecha por el portavoz vaticano, Federico Lombardi, quien afirmó que Benedicto XVI respeta el islam y busca el diálogo con las otras religiones y culturas, no ha servido para frenar la avalancha de protestas.

En Alemania, el Papa denunció la guerra santa islámica y vinculó el Islam con la tentación a la violencia. "Dios no se complace con la sangre, actuar contra la razón es contrario a la naturaleza de Dios. La fe es fruto del alma y no del cuerpo. Quien quiere llevar a alguno a la fe necesita hablar bien y razonar correctamente y no usar la violencia y la amenaza", afirmó.

El primer ministro palestino, Ismail Haniya, del movimiento islamista Hamas, ha condenado el discurso de Benedicto XVI y ha instado al Papa a "dejar de atentar" contra el islam.

"En nombre del pueblo palestino, condenamos el discurso del Papa sobre el islam. Sus palabras van en contra de la realidad y tocan la esencia de nuestra fe", declaró Haniya en una mezquita de Gaza. "El Papa debe revisar sus declaraciones y dejar de atentar contra el islam, que es la religión de más de 1.500 millones de personas en el mundo", añadió.

Poco antes, una granada hizo explosión en una de las iglesias más antiguas de Gaza sin causar víctimas.

Por otra parte, el portavoz del movimiento Al Fatah en Cisjordania, Fahmi Az-Zaarir, ha calificado de "insultantes" para el islam las declaraciones de Benedicto XVI y añadió que "no reflejan la tolerancia cristiana". Az-Zaarir manifestó que las declaraciones del Pontífice pueden conducir a un choque de culturas, y le pidió que "se retracte y las corrija".

‘Reflejan el odio de su corazón’

En Turquía, país que Benedicto XVI tenía previsto visitar el próximo mes de noviembre, el discurso ha originado duras críticas y protestas. El director del departamento turco de Asuntos Religiosos, Ali Bardakoglu, afirmó que las palabras del Papa "reflejan el odio que alberga en su corazón (…) Sus declaraciones están cargadas de rencor".

"Es una visión parcial y llena de prejuicios", juzgó Bardakoglu, por lo que pidió al Papa que pidiese excusas al mundo musulmán por sus palabras "arrogantes".

Sobre el viaje del Papa a Turquía Bardakoglu afirmó que "el mundo musulmán no tiene ningún interés en recibir la visita de una persona con semejantes convicciones del islam y su profeta".

Los Hermanos Musulmanes egipcios, la mayor fuerza de la oposición en el país, aseguran en su página web que "las declaraciones del Papa del Vaticano dañan al islam". En su página de Internet, esta agrupación islámica considera que las declaraciones del obispo de Roma reavivan la crisis abierta por las caricaturas de Mahoma publicadas por el periódico danés Jyllands-Posten en septiembre de 2005.

El Gobierno de Pakistán, ambas Cámaras de su Parlamento y la Asamblea de la provincia de Frente Noroeste han condenado unánimemente las palabras de Benedicto XVI.

La Asamblea Nacional aprobó por unanimidad una resolución que afirma que el Pontífice ha dañado los sentimientos de los musulmanes, lo que también "está en contra del estatuto de Naciones Unidas".

Por ello, la Cámara "exige que el Papa rectifique sus comentarios en el interés de la armonía entre las distintas religiones del mundo", declaró la resolución, adoptada por la Cámara Baja del Parlamento paquistaní, mientras el Senado aprobó una resolución parecida que afirmaba que sus comentarios muestran lo poco que sabe Benedicto XVI del islam.

Por otro lado, la portavoz del Ministerio paquistaní de Asuntos Exteriores, Tasnim Nasrin, advirtió de que esas declaraciones "lamentables y polémicas" podrían inflamar los sentimientos religiosos.

Asimismo, un portavoz de la alianza de partidos religiosos Muttahida Majlis-e-Amal indicó que "el Papa es una personalidad respetada, no solamente para los cristianos sino también los musulmanes. No debe bajar su estatura a través de hacer declaraciones como (el presidente estadounidense, George W. Bush)".

Reacciones en Europa

El secretario general de la organización islámica más importante de Reino Unido, el Consejo de Musulmanes de Reino Unido, Mohammed Abdul Bari, dijo que "esperamos que el Papa aclare su postura cuanto antes".

"Esperamos que un líder religioso como el Papa actúe y hable de manera responsable y que rechace los puntos de vista de emperadores bizantinos en pro de la verdad y de la armonía en las relaciones entre los musulmanes y los católicos", señaló. "Desgraciadamente, Benedicto XVI no lo hizo y esto ha generado una consternación comprensible que ha herido al mundo musulmán".

En Francia, personalidades musulmanas francesas se sumaroneste viernes al coro de críticas al Papa y le exigieron una rectificación.

El secretario general de la Unión de Organizaciones Islámicas de Francia (UOIF), Fouad Alaoui, en la emisora francesa RTL que "se ha cometido un error. Debe ser rectificado. Benedicto XVI debe presentar disculpas, rectificar sus declaraciones".

Alaoui, que es también vicepresidente del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM), dijo que "la Iglesia no debe respaldar estos derrapes", que muestran, dijo, que "nadie es infalible".

Por su parte, el presidente del CFCM y rector de la Gran Mezquita de París, Dalil Boubakeur, afirmó que "creemos en el mismo dios, el dios de la paz, del amor y la misericordia" y subrayó que el islam es ante todo "tolerancia y fraternidad".

La comunidad de musulmanes de Austria, que supone el 10% de la población del país, ha reclamado una "rectificación" por parte del Pontífice. "Espero de él sus excusas, su pesar o al menos una rectificación", declaró su portavoz, Carla Amina Baghajati.

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