“A pesar de las diferencias en la composición química y densidad entre las atmósferas terrestre y marciana, tenemos ahora un ejemplo definitivo de que ambas reaccionan de manera similar a la variación en los niveles de energía solar incidente a lo largo de la rotación de 25 días del Sol,” dice Elsayed Talaat, científico del Laboratorio de Física Aplicada de la John Hopkins University en Laurel, Maryland.Los hallazgos de Talaat ayudarán a comprender mejor a la comunidad científica las relaciones entre el Sol y sus efectos en las atmósferas planetarias.

Comparando los limitados datos ionosféricos adquiridos en 2003 por la Mars Global Surveyor y el instrumento de la NASA TIMED SEE, Talaat afirma que sus hallazgos proveen evidencias de que la fotoquímica de la ionosfera marciana responde de manera similar a la terrestre a la incidencia solar.

“La atmósfera superior de ambos planetas sufre impactos de diversos niveles de rayos X solares de alta energía, así como de radiación ultravioleta, durante la rotación del Sol,” dice Talaat.

“He observado la variación en la irradiancia solar encontrada en los datos del SEE y la he correlacionado con la variabilidad de la ionosfera marciana.

” Para compensar los diferentes periodos de rotación solar observados desde la Tierra y Marte, ajustó los datos del SEE según el marco temporal de Marte.

Cuando dos cartas describiendo los picos de densidad iónica en Marte y los de actividad solar en un mismo periodo de tiempo coinciden, los gráficos están alineados.

Los perfiles ionosféricos marcianos fueron recibidos por transmisiones de radio en el marco del experimento Radio Science Experiment de la MGS, dirigido por el Dr. David Hinson de la Universidad de Stanford.

Los datos están disponibles para los investigadores en http://nova.stanford.edu/projects/mod/ .

Sobre el TIMED

Desde su lanzamiento en 2001, el TIMED ha estado explorando una de las últimas fronteras atmosféricas terrestres (la zona de la ionosfera conocida como MLTI), recogiendo valiosos datos durante varias fases del ciclo solar.

Hasta ahora, el TIMED, así como una red mundial de lugares de observación terrestres, han realizado unas observaciones globales sin precedentes sobre la estructura básica de la región MLTI, su tempratura, presión y composición de vientos y química.

También las captaciones y emisiones de energía. Esta es la primera misión que mide simultáneamente todos los parámetros críticos que necesitan los científicos para comprender mejor los procesos que rigen los cambios en la atmósfera superior.

Marte es el cuarto planeta desde el Sol y suele recibir el nombre de Planeta Rojo.

Las rocas, suelo y cielo tienen una tonalidad rojiza o rosacea.

Este característico color rojo fue observado por los astrónomos a lo largo de la historia.

Los romanos le dieron nombre en honor de su dios de la guerra. Otras civilizaciones tienen nombres similares.

Los antiguos Egípcios lo llamaron Her Descher que significa el rojo. Antes de la exploración espacial, Marte era considerado como el mejor candidato para albergar vida extraterrestre.

Los astrónomos creyeron ver líneas rectas que atravesaban su superficie. Esto condujo a la creencia popular de que algún tipo de inteligencia habia construido canales de irrigación.

En 1938, cuando Orson Welles emitió una novela radiofónica basada en el clásico de Ciencia Ficción La Guerra de los Mundos de H.G.

Wells, se produjeron escenas de pánico debido a que un montón de gente creyó realmente que la Tierra era invadida por marcianos.

Otra razón que condujo a los investigadores a esperar la presencia de vida en Marte eran los cambios estacionales de color en la superficie del planeta.

Este fenómeno llevó a especular sobre la posibilidad de que las condiciones de la superficie produjeran un florecimiento de la vegetación durante los meses cálidos y un estado de latencia durante los períodos más fríos.

En Julio de 1965, la nave Mariner 4, transmitió 22 imágenes cercanas de Marte. Todo lo que se podía ver era una superficie con muchos cráteres y canales de origen natural pero ninguna evidencia de canales artificiales o agua circulante.

Finalmente, en Julio y Septiembre de 1976, las sondas Viking 1 y 2 se posaron sobre la superficie de Marte.

Los tres experimentos biológicos realizados por las sondas descubrieron una actividad química inesperada y enigmática en el suelo Marciano, pero no suministraron ninguna evidencia clara sobre la presencia de microorganismos vivos en el suelo cercano a las sondas.

De acuerdo con los biólogos de la misión, Marte es auto-esterilizante. Creen que la combinación de radiación ultravioleta solar que satura la superficie, la extrema sequedad del suelo y la naturaleza oxidante de la química del suelo impiden la formación de organismos vivos en el suelo Marciano.

Sin embargo, permanece abierta la pregunta sobre la existencia de vida en Marte en un pasado lejano.

Otros instrumentos no encontraron signo alguno de química orgánica en los dos puntos de aterrizaje, pero sí suministraron un análisis preciso y definitivo de la composición de la atmósfera Marciana y se encontraron trazas de elementos no detectados con anterioridad.

Fuente:

http://www.elporvenir.com.mx/notas.asp?nota_id=68960