JOSEP CORBELLA – 12/05/2006
BARCELONA

El campo magnético terrestre, que hace que las brújulas apunten hacia el norte, se está debilitando a un ritmo de un 5% por siglo desde 1840 tras haber permanecido estable por lo menos durante los 250 años anteriores, según una investigación de la Universidad de Leeds (Reino Unido) que se presenta hoy en la revista Science.Los autores de la investigación, que han reconstruido la historia del magnetismo de la Tierra desde 1590 a partir de los datos de cuadernos de bitácora de viejos barcos, precisan las causas del fenómeno. En condiciones normales, las líneas del campo magnético terrestre entran por el hemisferio norte y salen por el hemisferio sur. Pero en dos zonas del sur, concretamente bajo el Atlántico y bajo el Índico, se produce desde mediados del siglo XIX el fenómeno contrario: por allí entran líneas de campo magnético que van a salir por el hemisferio norte. Por lo tanto, las líneas que vienen del norte se encuentran con tráfico en dirección contraria, de modo que el campo magnético queda debilitado.

Esta situación no se debe a las acciones de la humanidad en la superficie terrestre, sino a procesos naturales que tienen lugar en el núcleo de hierro del centro del planeta, ha explicado por correo electrónico David Gubbins, primer autor de la investigación.

En el pasado se han producido cambios aún más acusados en el campo magnético terrestre, como una inversión de la polaridad hace 780.000 años. Antes de aquella fecha, una brújula hubiera apuntado hacia el sur. “Creo que los procesos físicos que hemos detectado son los mismos que actúan en una inversión”, declara Gubbins, pero esto no significa que un nuevo cambio de polaridad sea inminente, ya que “estos procesos suelen remitir antes de llegar a una inversión total”.

Fuente:

http://www.lavanguardia.es/web/20060512/51257305212.html