JULIO MARTÍNEZ/CORRESPONSAL

COLONIA HIDALGO, TEOTITLÁN DE FLORES MAGÓN.-

Impactante sorpresa se llevó la anciana Guadalupe Cardona cuando llegó a su corral de chivos para llevarlos a pastorear. Encontró a sus animales muertos, con diversas mordidas en el cuello y cuerpo, como si hubieran sido atacados por el Chupacabras.El hecho resulta insólito porque es difícil entender qué tipo de bestia puede atacar a tantos chivos en una sola noche, pues según informes de los familiares de la dueña, el resultado de este ataque fue de 10 cabras cargadas muertas, 3 cabritos devorados, 4 chivos heridos y 3 desaparecidos, sumando un total de 20 cabezas, lo que provocó una pérdida de más de diez mil pesos.

La forma en que fueron atacados los chivos resulta extraña y hace suponer varias hipótesis: en primera porque los chivos fueron atacados en el interior de su propio corral, que estaba debidamente cerrado, pero resulta que unos aparecieron muertos afuera del corral, en tanto que otros fueron heridos adentro y tres que desaparecieron misteriosamente.

Los familiares de la propietaria del ganado, cuyo corral se localiza en la colonia Hidalgo, pasando la carretera y cerca de una antigua granja de cerdos, aseguran que los causantes de esa masacre son los “perros salvajes” que viven en los basureros clandestinos que hay a orillas de la carretera.

TESTIMONIO MACABRO

Entrevistado sobre la masacre de chivos, el velador de la antigua granja de cerdos comentó que los hechos ocurrieron en punto de las 12 de la noche.

Escuchó una pelea como si fueran perros. Los animales se enfrascaron en un combate a muerte y del cual se escucharon fuertes ladridos y aullidos; sin embargo, de pronto los perros dejaron de ladrar como si hubieran sido dominados, y sólo escuchó el escándalo que hicieron los chivos al sentirse invadidos en su corral, y después escuchó gritos al ser atacados por los depredadores, gritos desgarradores que le enchinaron la piel.

En lugar de intervenir, mejor se encerró en su cuarto porque pensó que eso podría ser cosa mala; además que el ataque duró de las 12 hasta las 4 de la mañana, y durante ese tiempo el permaneció impávido escuchando los gritos de los pobres animales al ser devorados vivos.

OPINA EL REGIDOR DE ECOLOGÍA

En opinión propia del regidor de ecología, Modesto Altamirano, la masacre de chivos de la colonia Hidalgo no fue por perros salvajes, sino por seres humanos, es decir, ratas de dos patas que acostumbran robar ganado y cubrir sus huellas haciendo notar estos hechos que resultan muy raros.

MITO O REALIDAD

Pero sobre este caso que ha ocasionado incertidumbre en la población, varios vecinos de la colonia en donde sucedieron los hechos, comentan que esto no fue obra ni de perros salvajes ni de seres humanos, sino más bien de un Nahual que ronda por esos lugares y que inclusive ha sido visto por algunas personas durante las noches.

Algunas personas dijeron que en más de dos ocasiones han visto un enorme perro negro de ojos rojizos, pasearse por el rumbo del Tiro Blanco después de las 7 de la noche, y que este espanta a los perros, pues uno comentó que cuando el regresaba del monte con su manojo de leña y acompañado de su fiel perro, se toparon con ese enorme can negro e inmediatamente su perrito comenzó a llorar como si sintiera mucho miedo, esto a pesar de que los perros casi no le temen a nada.

Cabe señalar que según la leyenda los Nahuales son personas que tienen un pacto con la oscuridad, y durante las noches se pueden convertir en animales como perros y gatos para robar ganado, que es lo que mejor saben hacer, por ello los vecinos comentan que los chivos pudieron ser asesinados por ese perro negro que han visto y del cual aseguran que es un Nahual que vive precisamente por esos rumbos.

EL REGRESO DEL CHUPACABRAS O SECTAS SATÁNICAS

Luego de darse a conocer la noticia sobre este caso insólito, los habitantes de Teotitlán han comenzado a sacar sus propias conclusiones, y hay quienes comentan que esto puede ser obra del Chupacabras, este ser desconocido y maligno que pudiera estar de regreso en este año electoral, para causar la distracción de la gente.

Sin embrago, hay otras personas que señalan que este hecho puede ser obra de integrantes de alguna secta, en virtud de que han sabido que ya hay varios jóvenes que dicen adorar a la santa muerte y así lo demuestran por su forma de vestir y actuar ante la sociedad.

Aunque todas estas versiones consisten en meras suposiciones, lo cierto es que el caso de la matanza de chivos resulta raro e inexplicable, por lo que las autoridades se encuentran investigando para encontrar una explicación adecuada.

Fuente:

http://www.noticias-oax.com.mx/articulos.php?id_sec=4&id_art=40370&id_ejemplar=1073