En México, el lugar donde los antiguos machos mexicanos se desahogan, se divierten y saborean su bebida favorita hasta emborracharse, es en una cantina, o sea es un bar o taberna; o como infiere la Real Academia de la Lengua: es un establecimiento público, de carácter popular, donde se sirven y expenden bebidas y, a veces, se sirven comidas. Una de las características más chuscas de las cantinas mexicanas es que son fuente inagotable de las más extrañas apuestas o retos que se puedan imaginar, que van desde la muy común apuesta de quién conquista a cierta mujer hasta la posible perdida del miembro viril, si, desde lo más común hasta lo más aberrante, sin embargo, me parece que no es un fenómeno exclusivo de las cantinas mexicanas, sino, también, en otras partes del mundo, los hombres, bajo el influjo del alcohol hacen la más absurdas apuestas, en esta ocasión voy a escribir sobre una mitológica apuesta de cantina que afecto a miles de personas de una manera considerable, también, tiene mucho que ver conmigo, mis experiencias personales y sobretodo con mi propio escepticismo, asimismo es un tema de actualidad ya que involucra a famosos actores internacionales de cine, ¡Órale! Pero desgraciadamente igualmente menciona lo peor del ser humano, hasta donde puede llegar por su vanidad y como se aprovechan algunos de la necesidad de la gente por creer. Es una historia triste, donde los malos triunfan y se aprovechan de los inocentes y los héroes brillan por su ausencia.

Como toda historia, y más esta que es muy personal, algunas personas y circunstancias que la ligan a esta, están cambiadas para salvaguardar su anonimato, otras personas si están mencionadas ya que son personajes públicos. Bueno, igual como toda historia, empieza, por un principio y este es que hace como 17 o 20 años, cuando estaba por en medio o por terminar mi carrera, empecé a escuchar de una filosofía de superación personal llamada dianética, que básicamente promulgaba lo siguiente; “Existe una fuente única de todos tus problemas, estrés, infelicidad, depresión e inseguridad. Se llama mente reactiva. La Dianética se deshace de ella.” Esta “filosofía” termino como una religión llamada cienciología. Lo último que he escuchado de ella son las “inteligentes” declaraciones del actor estadounidense Tom Cruise, criticando a la actriz estadounidense Brooke Shields, por tomar depresivos para superar una crisis posparto. Este, al parecer, irrelevante escándalo entre las estrellas del celuloide, tiene un curioso trasfondo, ya que la motivación de Cruise para su declaración, es que pertenece a la iglesia de la cienciología, la cual considera a la psiquiatría como una pseudociencía y rechaza que los desequilibrios químicos que dan origen a las depresiones deban ser corregidos a base de medicinas, sino, con ejercicios y vitaminas.

La Iglesia de la cienciología, como toda secta de dominación, exige que sus adeptos defiendan sus preceptos, aun los más ridículos, esto les asegura que la victima no solo les crea, sino, que este comprometido con ellos al grado de exponer su vida y sobretodo sus recursos al servicio de sus lideres, otro ejemplo es el de los testigos de Jehová, que exigen a sus adeptos el no recibir transfusiones de sangre aun si su vida peligra o depende de ello, ya que una secta de dominación no quiere creyentes necesita personas comprometidas, solo así se pueden obtener el poder para dominarlos y esquilmarlos completamente.

Como les decía conocí a la cienciología, hace años, porque un pariente político compro el libro de dianetíca de L. Ronald Hubbard, el cual es la “Biblia” de esta reciente religión de los años 50´s, y Hubbard su “profeta”. Este pariente quedo atrapado, en más de un sentido, en las redes de este filosofía de superación personal, no quisiera decir que el resultado de que él se involucrara con la cienciología fuera que se disolvió su matrimonio y que su hijo al pasar una crisis juvenil casi acabo con su vida o para ser menos melodramático casi acabo con su proyecto de vida, pero no ayudo en nada esta “moderna técnica de solución de problemas” a su situación, incluso el poco cariño que le tenía, su ahora exesposa y el respecto de sus hijos, si los perdió por culpa de esta pseudoreligión .

Trate en más de una ocasión de leer el libro pero es tan absurdo, que aun siendo tan joven, no me pude tragar tantas tonterías como por ejemplo que “Se expresa un agradecido reconocimiento a los grandes pensadores de los últimos cincuenta mil años, sin cuyas disquisiciones y observaciones no habría sido posible la creación y construcción de Dianética”. Nunca pude pasar de las primeras paginas, porque, como toda técnica de sugestión solo son una serie de ideas difusas, promesas de un mundo mejor, y el constante ofrecimiento que más adelante te lo explicaran todo , o sea nada en concreto, ya que lo que pretende, esta técnica, es eliminar en primer lugar a las personas con criterio, estas se aburren desde las primeras paginas, solo las personas acomplejadas o con problemas personales son las que les interesan, para comprobárselos traten de encontrar en http://quees.cienciologia.org.mx/, Escrito por ellos mismos, si en las primeras 5 paginas lo definen, no lo hacen, solo es una técnica de sugestión para las mentes débiles o vulnerables. Con respecto a este pariente una de las cosas que se me quedo grabado, fue una critica que hizo uno de mis once hermanos de él, pero principalmente de esta secta de dominación y fue el siguiente comentario: “Este Hubbard, que era un científico al nivel de Sagan o Asimov, acepto una apuesta de cantina en que lo retaba a crear una nueva religión y aparte, vivir de ella” palabras más, palabras menos, me impresiono saberlo, pero al pasar el tiempo lo catalogue como una leyenda urbana y la obvie.

Una vez superado este episodio de la dianetíca o cienciología, según sus adeptos la primera es una técnica y la segunda es su religión, escuchaba esporádicamente las tristes historias del sometimiento o hundimiento de este pariente en esta secta, y el menosprecio que generaba entre los suyos, incluso en una ocasión escuchábamos, secretamente, sus hijos y yo, uno de sus audio casete explicativos de esta religión, lo poco que oímos solo eran unas sarta de tonterías, como que las personas que sufrían una operación quirúrgica, acababan traumatizados dado que por una extraña razón, cuya explicación era a todas luces insuficiente, la persona “sentía” lo que le estaban haciendo aun estando anestesiado, y otras tonterías por el estilo que se resumían en que las demás personas eran unas “mentes reactivas” y los cienciologos las personas que estaban en lo correcto. Ese es otra característica de una secta de dominación, señalar a sus integrantes que el mundo se divide en “ellos” y “nosotros”, donde ellos son unos ignorantes y los de la secta los que tienen la verdad absoluta, incluso en el extremo de las sectas catalogadas como suicidas, los “otros” pasan a formar las filas del enemigo, David Koresh, el líder de la secta de los davilianos todo el tiempo les decía que los “otros” eran los “babilónicos” y que tarde o temprano tendrían que entablar una guerra contra ellos, en el caso de los adeptos a la cienciología la señalización de los “otros” es que están equivocados o tienen una mente reactiva y que ellos tienen la razón, por ello la declaración de Tom Cruise de “Usted no conoce la historia de la psiquiatría. Yo si” cuando Matt Lauer, anfitrión del programa televisivo “Today”, le cuestiono sobre sus criticas a Brooke Shields. Me pregunto, si esta historia que sabe de la psiquiatría fue por un estudio documental que el actor de Hollywood realizo o solo repite como periquito entrenado lo que la secta le “informo”.

Al pasar el tiempo y soslayar este caso de mi pariente, me tope de nuevo con el famoso Hubbard, y fue que después de salir de la escuela cuando estaba solicitando trabajo en unos cuestionarios para investigar mis actitudes y personalidad el copyright estaba a nombre de este personaje, de ahí deduje que el campo de la ciencia que se dedicaba era a la psicología.

Desde muy joven he tenido la fortuna de leer la obra de Carl Sagan, pero como soy de una familia de escasos recursos, al principio lo hice con libros prestados o por medio de la televisión, por ello la obra de Sagan no la he leído en una forma cronológicamente correcta, por ello hasta muy tarde me entere, por unos de sus libros, que precisamente Carl Sagan hacia el mismo comentario de la apuesta de cantina de Hubbard, pero calcificándolo como un rumor no confirmado, lo cual me llevo a pensar en el viejo dicho de que si el “río suena es que agua lleva” pero me negué a considerar esta posibilidad por el misma filosofía escéptica, tenía serias dudas de que esto fuera algo más que un mito moderno.

Otra de las noticias que me llegaban de esta secta era que estrellas como Jhon Travolta, Dustin Hoffman y Tom Cruise y su exesposa practicaban esta religión y sobre todo aportaban grandes sumas de dinero para su difusión.

Pero lo ultimo que me ocurrió fue verdaderamente curioso en el plano personal y que cerro el circulo que había empezado hace tantos años con el comentario de mi hermano, y fue que hace un año compre un libro en una papelería que remataba libro
s en un clásico montón de ofertas, me intereso porque era el libro en el que se basaron para hacer una película que ya había visto con anterioridad, y que el protagonista es Jhon Travolta llamada “Batalla por la Tierra”, el autor del libro es L. Ronald Hubbard, al leer el libro, pero sobre todo su introducción, ya que esta habla del mundo de la ciencia-ficción y de los grandes maestros de la epoca de oro, Asimov, Clarke. Etc, y del mitológico Campbell, editor de esta revista y máximo impulsor del genero, no lo asociaba con el mismo autor del libro de dianetica, creía que era un homónimo, sin embargo, por las declaraciones de Tom Cruise, el cual me motivo el hacer este articulo pero en otro sentido, me llevo a hacer una pequeña investigación de esta secta y leí la siguiente noticia en la http://www.jornada.unam.mx/1999/nov99/991124/steisleger.html, la cual me aclaro que Hubbard no era ningún científico sino un notable escritor, no precisamente de ciencia ficción, pero si había incursionado en el genero, quede asombrado al comprobar que el autor del libro que compre y el de dianetíca son los mismos, pero son dos personas completamente diferentes, es como si tuviera una personalidad múltiple, son dos idiosincrasias totalmente distintas, una un escritor racional y el otro un filosofo completamente irracional, al menos que, la apuesta de cantina fuera verdad. Yo, como afirman los psiquiatras ingleses, tengo serias dudas en que el trastorno de la personalidad múltiple exista, así que a estas alturas estoy convencido que esta apuesta en realidad existió, no concibo que una persona tan racional y capaz sea el creador de la basura de la cienciología, al menos que su motivación sea el reto de crear algo tan visiblemente ridículo y engañar a decenas de miles, es triste pensar que la vanidad de este gran escritor lo llevo a crear esta secta con el objetivo de ganar una apuesta, pero cada vez que leo el absurdo catecismo de la iglesia de la cienciología me inclino a pensar que este mito es verdadero, y también pienso que L. Ronald Hubbard, acabo teniendo un infinito desprecio por este tipo de personas que creían en los evidentemente absurdos postulados de su absurda doctrina, al grado de dejarle como herencia al mundo una secta que envenena el alma de miles de personas y de las cuales algunos grandes, pero vacuos, actores de Hollywood son sus promotores.