Señala la revista New Scientist que está cobrando fuerza en el mundo la teoría creacionista con nuevas estrategias contra la llamada teoría de la evolución Una nueva ola fundamentalista contra la llamada teoría de la evolución, propuesta por Charles Darwin en el siglo XIX para explicar los mecanismos mediante los cuales los organismos cambian a través del tiempo, ha cobrado nueva fuerza alrededor del mundo, según un artículo de New Scientist. La revista da a conocer las nuevas estrategias empleadas por sectas cristianas, principalmente en los Estados Unidos y algunos países de Europa, África y Latinoamérica, las cuales han reaccionado a las decisiones tomadas por la Suprema Corte de ese país, que han hecho virtualmente imposible enseñar en las escuelas públicas el llamado “creacionismo divino”, que promueve la interpretación literal del génesis de la Biblia.

Ante ello, diversas sectas han inventado un nuevo término llamado “diseño inteligente”, el que según afirman es una alternativa científica al darwinismo.

Para la comunidad científica esta nueva propuesta es mucho más radical y peligrosa que las anteriores, ya que redefinen el papel de la ciencia para incluir explicaciones no naturales o sobrenaturales a fenómenos naturales.

De acuerdo a la revista, estados como Kansas han logrado que toda mención a la evolución fuera borrada de los estándares educativos estatales.

Esta decisión fue revocada en el 2002, sólo que ahora con las nuevas elecciones del 2004 una nueva mayoría conservadora ha hecho que la posibilidad del debate se reabra en esa entidad.

Los argumentos que estos grupos fundamentalistas defienden tienen que ver con lo que ellos llaman ateísmo religioso, al que relacionan con la evolución, por lo que piensan que el incluir el creacionismo en la educación serviría de contrapeso.

Otros países también han comenzado a sentir el embate de los creacionistas, como el Reino Unido, donde algunos personajes religiosos millonarios han realizado donaciones en escuelas privadas, dentro de las cuales se promueve el creacionismo e incluso planean abrir más escuelas.

En Serbia o Noruega, algunas sectas fundamentalistas han presionado para que éste se estudie en las escuelas.

Turquía tuvo sus primeros contactos con fundamentalistas norteamericanos en 1999, desde entonces es posible hallar textos con estas ideas en su sistema educativo.

En África y Latinoamérica, los fundamentalistas cristianos han presionado a los gobiernos para modificar los programas educativos, como ya ocurrió en Río de Janeiro, donde el año pasado los científicos brasileños protestaron porque el Departamento de Educación aprobó la enseñanza del creacionismo.

De acuerdo a New Scientist, lo que está ocurriendo es un esfuerzo político por cambiar el contenido y naturaleza de la ciencia en sí misma.

Fuente: http://www2.eluniversal.com.mx/pls/impreso/noticia_supl.html?id_articulo=23365&tabla=articulos