Veterinario le resta importancia al hecho.
Conocida la noticia dada por LA OPINION en la edición de ayer, sobre un ternero muerto en la zona de Paraje Colonia Margarita, que hacía recordar las mutilaciones sufridas por centenares de animales ocurridas hace dos años, un médico veterinario de la zona le restó importancia al hecho, ya que según sus propias palabras, “no hay nada anormal en esas muertes, como tampoco en esos cortes que suponen una perfecta cirugía hecha con bisturí”.En la edición de ayer, merced a una información llegada a LA OPINION vía corresponsal de Ataliva, Domingo Abel Bongianino, se daba cuenta sobre la misteriosa muerte de un ternero en edad de destete, ocurrida en el sector Noreste del distrito de Humberto Primo, conocido como Paraje Colonia Margarita.

La ubicación del lugar del hecho, también fue tema de llamados telefónicos a este diario, manifestando que Colonia Margarita es una población ubicada al sur del departamento Castellanos, entre los distritos de María Juana y San Vicente.
Ocurre que existe en la zona norte de Humberto Primo un sector denominado Paraje Colonia Margarita, de allí entonces la confusión de algunos lectores.

La noticia dada a conocer por LA OPINION recorrió el país en la jornada de ayer, cuando los medios más importantes (radiales, escritos y televisivos), reiteraban este hecho, de manera especial porque se recordaba lo ocurrido hace dos años atrás, cuando centenares de animales aparecían muertos, faltándoles algunos órganos, los que pareciera los hubieran cortado con una perfecta cirugía.

Todo esto dio lugar a que el médico veterinario Omar Bossio de la localidad de Presidente Roca, se pusiera en contacto con este Diario, dando su versión sobre estas mutilaciones, en base a su experiencia de 20 años de profesión.
“Cuando se sucedieron aquellas muertes de animales, hace dos años, salí a recorrer los campos y estaban todos así y es lo que se sigue viendo todos los días”.

Además de ofrecer un video para corroborar sus dichos, el profesional manifestó que “lo que les falta en primer momento a esos animales, son las partes más carnosas, como la lengua, las mandíbulas, el ano, los ojos, o sea que los animales que se alimentan de ese animal comen hasta donde comienza el hueso, y de noche se puede observar esa acción carroñera con zorros, peludos, perros salvajes, entre otros”.

Al comer esas partes “se retrae la piel, que comienza a ser más dura, entonces la misma se reseca y queda el círculo que pareciera hecho con bisturí, pero nada de esto es real, solamente es el comportamiento de la piel al faltarle la carne”, agregó Bossio.

Con respecto al ave carroñera de esta zona, el más conocido es el carancho, del cual el veterinario de Roca aseguró que “jamás ese carroñero va a comer los párpados de los animales muertos, sino que sacan los ojos enteros”.

El médico veterinario apoya sus palabras asegurando que “personalmente hago 300 necropcias al año, o sea que prácticamente estas muertes las veo todos los días. Lamentablemente estos hechos se agrandan y lo único que provocan es que los chicos que viven en el campo y tengan que hacer tareas inherentes al mismo sientan temor”.

Tal como se había dicho en la edición de ayer, testigos de este último hecho fueron ocho personas, todos conocedores del tema de campo, criados en el campo, por lo tanto se supone que deberían estar habituados a este tipo de “fenómeno”, sin embargo les llamó la atención, incluso uno de ellos manifestó a LA OPINION que “nunca, en toda su vida de vivir en el campo había observado una situación similar”.
En este sentido Bossio no contradice esas versiones sosteniendo que “cada uno dice lo suyo, pero los invito a recorrer los campos y de 20 animales muertos, al menos 18 están en las mismas condiciones”, por las causas ya dichas por él mismo.

Las explicaciones técnicas oficiales de los hechos similares ocurridos años atrás, daban como “culpable” de esos cortes perfectos al llamado “Ratón Hocicudo”, lo que le hizo manifestar al médico veterinario consultado que “sí es cierto, los ratones comen carne y en los campos está llenos de esos roedores, y seguramente cuando se hicieron filmaciones de aquellas muertes justo habrá aparecido esa especie”.

Reiteró su invitación para observar un video, filmado por el mismo profesional, “donde se ven esos animales con caranchos que lo están comiendo, incluso se ven las partes cómo se van comiendo”, y en sus recuerdos apareció “el caballo muerto en Vila, que lo tengo filmado y no hay nada que llame la atención, para el común de la gente puede ser, pero para alguien como uno que está en este tema desde hace 20 años no hay nada paranormal”.

Sobre la muerte de este ternero de corta edad, una posible causa “puede ser su castración, es muy factible que su muerte se halla producido por un desangrado”, y para reafirmar aún más sus palabras, Omar Bossio relató que “hace un par de días, con el propietario de un campo observamos un animal muerto con las mismas características que el que dio lugar a la noticia y en broma le manifesté a quien me acompañaba que por aquí anduvo el chupacabra, o sea que es muy común ver animales muertos con esa mutilaciones”, comentó finalmente nuestro interlocutor.

Fuente: La Opinion