El efecto que muchos pacientes logran con la acupuntura no es puro placebo. Un estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Southampton (Reino Unido), ha demostrado que esta práctica china milenaria produce un misterioso efecto real en el cerebro. Publicado en la revista «Neuroimagen», la investigación concluye que la acupuntura activa determinadas zonas cerebrales.Los científicos utilizaron sistemas de diagnóstico por imagen sofisticados (Tomografía por Emisión de Positrones o PET) para conocer qué sucede en los cerebros de las personas que recurren a la acupuntura. En concreto, los voluntarios eran pacientes con artritis que acudían a terapia para mitigar los dolores. Las imágenes se tomaron con diferentes tratamientos con agujas. En la primera intervención, se puso a los pacientes agujas despuntadas con las que era imposible atravesar la piel y, por tanto, no debería tener valor terapéutico. Después las imágenes se tomaron con unas agujas especiales que podían engañar a los enfermos porque daban la sensación de perforar la piel aunque realmente no lo hacían. Y, por último se utilizaron las auténticas agujas de acupuntura.

Cuando los investigadores estudiaron los resultados de las imágenes ofrecidas por PET descubrieron marcadas diferencias entre los tres tipos de agujas utilizadas. Cando se tocó a los voluntarios con las agujas despuntadas sólo se activaron las áreas cerebrales asociadas al tacto. Al utilizar las agujas que daban la sensación de perforar la piel, se manifestó el área asociada con la producción de opiáceos naturales, que intervienen para mitigar el dolor. Esta misma zona se excitó al aplicar la verdadera acupuntura, pero además se observó una mayor actividad en una zona del cerebro, denominada córtex insular.

Dolor cervical crónico

No está muy claro lo que esto significa, «aunque demuestra que la acupuntura produce un efecto real en la actividad cerebral», advierte el coordinador del estudio, George Lewith. «Lo que hemos demostrado es que efectivamente el paciente que se somete a una acupuntura está previamente condicionado por cierto efecto placebo, pero creemos que también tiene un valor terapéutico». Otro estudio realizado con personas que tenían dolor cervical crónico comprobó que una sustancia inocua reducía el dolor en un 80 por ciento de los casos. La acupuntura podría estar proporcionando ese doble beneficio: el efecto placebo y el real.

Fuente: http://www.abc.es/abc/pg050507/prensa/noticias/Sociedad/Sanidad/200505/07/NAC-SOC-061.asp