El Juzgado de Instrucción número 28 de Madrid autorizó ayer la entrada en el Edificio Windsor a la Policía para cerrar algunos de los accesos subterráneos que podían estar abiertos desde el momento del incendio. Esta circunstancia hace cobrar fuerza la hipótesis de la empresa Asón Inmobiliaria, que sostiene que personas pudieron entrar en el edificio por un acceso no controlado después de que bomberos y agentes de seguridad abandonasen el inmueble.Desde la Sociedad Española de Investigaciones Parapsicológicas sostienen que las imágenes captadas por la cámara de un videoaficionado son imágenes de personas humanas y no de fantasmas.

La Policía científica examinará la cinta de vídeo grabada por particulares la noche del incendio. De momento ha sido entregada en el Juzgado de Murcia y debe seguir los trámites legales hasta que llegue a Madrid. Según la hipótesis de Asón Inmobiliaria sobre las imágenes, lo más lógico y creíble es que esas personas entrasen en el edificio por algún acceso no controlado después de que los bomberos y el personal de seguridad y mantenimiento Windsor abandonasen el inmueble, una teoría que puede quedar reforzada por la existencia de túneles.

La Sociedad Española de Investigaciones Parapsicológicas cree que las dos siluetas grabadas por un videoaficionado en planta 16 del edificio mientras se producía el incendio “corresponden a personas humanas y no a ningún tipo de fantasma, espectro o reflejo”. Según su presidente, Pedro Amorós, las siluetas que se ven en las imágenes en el interior del rascacielos realizan unos movimientos que “no se corresponde realmente con los efectuados puramente por figuras fantasmales”.

Escépticos

Amorós recordó las apreciaciones realizadas por bomberos sobre la temperatura del edificio en ese momento y descartando que se tratara de personas de carne y hueso y precisó que ellos son escépticos con el tema y se decantan más por que sean personas reales.

Por su parte, el presidente de la Sociedad de Investigaciones Parapsicológicas de Toledo, Ángel Gil, dio hoy total credibilidad a las imágenes captadas por un matrimonio de Reus (Tarragona) y descartó el montaje televisivo, y manifestó que las dos siluetas que aparecen en torno a las tres y media de la mañana en el rascacielos “no se corresponden con ningún fenómeno paranormal y se trata con toda seguridad de personas humanas”.

Fuentes: http://iblnews.com/news/noticia.php3?id=124742