¿Tiene, o cree tener, poderes paranormales? Ésta es su oportunidad. Un escéptico estadounidense ofrece un millón de dólares a quien demuestre poseer tales facultades. Ya está en marcha la preselección en Alemania.Operación Triunfo podría quedar chica al lado de la empresa que se ha propuesto llevar a cabo el estadounidense James Randi. Experto en trucos e ilusionismo, Randi ofrece una suculenta recompensa a quien posea poderes extrasensoriales. El asunto, por lo visto, va en serio. Tanto es así que los postulantes deberán someterse a exámenes científicos para comprobar que lo que hacen no tiene una explicación natural y racional. Quien pase airoso la prueba, puede ganar un millón de dólares.

Uri Geller en entredicho

La Sociedad de Estudio Científico de Ciencias Paranormales (GWUP) organiza la preselección en Alemania. Allí pueden presentarse desde personas que dicen ser capaces de descubrir corrientes de agua con una varita, hasta aquellos que afirman poder doblar metales con la fuerza de su mente, como Uri Geller. Para Randi, quien en 1990 escribió un libro sobre este famoso personaje, lo que hace Geller son meros trucos, que pueden explicarse científicamente. Lo mismo sostiene el presidente de GWUP, Armadeo Sarma, asegurando que “por cierto Geller está cordialmente invitado a participar en nuestras pruebas”.

Cada postulante debe explicar en forma concreta qué capacidades extrasensoriales pretende demostrar y qué parámetros sirven para cuantificar el resultado. Sobre esa base, la GWUP desarrollará un test apropiado para medir el éxito.

Experiencias decepcionantes

Dicha sociedad tiene bastante experiencia en la materia. En 1990 organizó una prueba con 19 personas que decían poder encontrar agua con una varita. Para tales efectos se instalaron varias cañerías y algunas, elegidas aleatoriamente, fueron llenadas con agua. La tarea consistía en determinar cuáles llevaban líquido y cuáles no. Según Sarma, los aciertos fueron tan escasos, que se pueden explicar por la simple ley de las probabilidades.

Los organizadores estiman que la recompensa de 1 millón de dólares de seguro motivará a mucha gente a hacer el intento. Claro está que tendrán que pensar muy bien si se arriesgan a someterse a la lupa de los científicos, considerando que se expondrán al bochorno de quedar al descubierto públicamente. Sea como fuere, Randi estima que pasará bastante tiempo hasta que encuentre a alguien que realmente pueda reclamar con derecho la suma prometida.

Fuente:

http://www.dw-world.de/spanish/0,3367,7585_A_1115440_1_A,00.html