Amante de los riesgos y con gusto por las situaciones límites es, al parecer, Emilio Gálvez Dávila, el chileno que fue detenido el 1 de enero en el aeropuerto madrileño de Barajas, mientras anunciaba a gritos que se venía el fin del mundo a los pasajeros de un vuelo comercial entre España e Inglaterra. La investigación sobre su vida, que efectúa la policía ibérica, asegura que el aprehendido fue bombero y experto en rescates.El sujeto permanece internado en un hospital de la capital española, luego de que los chequeos de rigor arrojaron que portaba dos navajas con empuñadura plástica, que no habían sido detectadas por los controles del terminal aéreo.

Según se pudo averiguar ayer, el chileno de 35 años trabajaba hasta hace poco combatiendo incendios. “Efectivamente era bombero en el ayuntamiento de Madrid, pero fue dado de baja y ya no pertenece a dicho cuerpo”, explicó el cónsul chileno en España, Eduardo Bonilla.

El diplomático agregó que el detenido posee doble nacionalidad -chilena y española- desde hace varios años y que sufre de desórdenes sicológicos. Justamente, el cónsul estimó que a Gálvez le sobrevino una crisis cuando estaba despegando el avión y ese estado habría provocado el extraño comportamiento. Por el mismo motivo, se lo derivó hacia un centro clínico y no directamente a la cárcel.

“Lo principal que hay que recalcar es que, al parecer, no se trataba de un acto terrorista como se temió en un principio, sino que de un desequilibrio nervioso”, aseguró Bonilla.

Experto en rescate (y en Aromaterapia – ed.)

Por su parte, la Guardia Nacional informó que las pesquisas preliminares indican que en su calidad de especialista en situaciones de urgencia, el tipo también habría sido integrante del Samur, un grupo de protección civil dedicado a atender emergencias, antes de dedicarse a ofrecer en su domicilio completas sesiones de masaje. De acuerdo con la policía, el servicio incluía además aromaterapia.

Navegar por internet era otro de sus vicios, ya que luego de terminar su etapa bomberil se dedicó a participar en una página web que aboga por los derechos laborales de los profesionales españoles. En ese sitio se presentaba como “bombero de baja y experto en rescate”.

Mientras, en Santiago, el jefe de turno de la Cancillería, Arturo Urrejola, dijo que no poseía información reciente sobre el caso, aunque comentó que probablemente “se está manejando a un nivel más alto”.

http://www.lun.com/ElDia/detalle_noticia.asp?cuerpo=701&seccion=801&subseccion=901&idnoticia=C37989897961875