Un científico fundado por el Gobierno de los Estados Unidos por medio de ingeniería genética ha creado deliberadamente una forma extremadamente mortífera de mousepox, una enfermedad de los ratones que se caracteriza por grangenar los miembros, y que es de la familia de la viruela.El nuevo virus mata a todos los ratones aunque se les de medicina antiviral así como vacunas que normalmente los protegería.

El trabajo no se detuvo ahí. El virus cowpox, que infecta un gran número de animales incluyendo a humanos, ha sido alterado genéticamente de manera similar.

El nuevo virus, que está a punto de ser probado en animales, debería ser mortal solo para los ratones, dijo Mark Buller de la Universidad de St Louis. Dice que su trabajo es necesario para explorar lo que los bioterroristas pudieran hacer.

Pero la investigación transforma los viruses de viruala que causan solo infecciones leves en humanos en enfermedades mortales incluso en gente que haya sido vacunada.

Y las vacunas son por el momento nuestra principal defensa contra las viruelas y sus parientes tales como el monkeypox que los Estados Unidos desarrolló este año. Algunos investigadores piensan que la última investigación es riesgosa e innecesaria.

“Tengo una gran preocupación de hacer esto en un virus de viruela que puede cruzar especies”, dijo Ian Ramshaw de la Universidad Nacional Australiana en Canberra cuando se le comentó sobre el trabajo de Buller.

Ramshaw era miembro del equipo que accidentalmente descubrió cómo hacer el mousepox más mortífero. Pero el mousepox modificado que su equipo creó no era tan mortal como el de Buller.

Desde entonces, dijo Ramshaw, su equipo ha creado también formas más mortales de mousepox, y ha utilizado el mismo método para desarrollar un virus más letal de rabbitpox.

Pero esta investigación reveló que los virus de viruela modificados no son contagiosos, dijo. Estas son buenas noticias en el sentido de que estos virus no pueden causar destrozos ecológicos acabando con poblaciones de ratones o conejos en el mundo si se llegaran a escapar de un laboratorio.

Sin embargo, este descubrimiento también significa que algunos bioterroristas pudieran estar más tentados a usar el mismo truco para modificar un virus de viruela que infectara a humanos. Tal enfermedad, como el ántrax, podría infectar solo a aquellos directamente expuestos a ella. No cundiría alrededor del mundo repercutiendo en los atacantes. Pero no hay garantía de que otros virus de viruela modificados de manera similar pudieran no ser contagiosos.

El equipo de Ramshaw hizo su descubrimiento inicial mientras desarrollaba vacunas anticonceptivas para esterilizar ratones y conejos sin matarlos. Los investigadores modificaron el virus del mousepox agregando un gen de un inmunosupresor llamado IL-4, esperando que esto elevara la producción de anticuerpos.

En vez de esto, el virus modificado fue mucho más letal, matando al 60 porciento de los ratones vacunados. La adición del IL-4 parece cambiar una parte importante del sistema inmune llamado la respuesta célula-intervenida.

Ahora Buller ha creado un linaje de mousepox que mata al 100 porciento de los ratones vacunados, aún cuando también sean tratados con la medicina antiviral cidofovir. Sin embargo, un anticuerpo monoclonal que arrasa con el IL-4 sí salvó a algunos.

Su equipo “optimizó” el virus poniendo el gen IL-4 en una parte diferente del genoma viral y agregando una secuencia promotora para maximizar la producción de la proteína IL-4, dijo en una conferencia de bioseguridad en Ginebra la semana pasada.

Buller también construyó un virus cowpox que contenía el gen IL-4 de ratón, el cual está a punto de ser probado en ratones en el Instituto de Investigación Médica de Enfermedades Infecciosas de la Armada de los Estados Unidos en Fort Detric en Maryland.

El cowpox infecta a las personas, pero Buller dice que la proteína IL-4 es específica de las especies y no afectaría al sistema inmunológico humano. Los experimentos están siendo practicados en un contenedor biológico con el segundo nivel más alto de seguridad.

Ramshaw dice que no hay razón para hacer los experimentos con cowpox, ya que el trabajo de su grupo en ratones ha demostrado que el método funciona para otros virus de viruela. Aunque que los virus que contienen el gen IL-4 de ratón no debe ser letal en humanos, los virus recombinados pueden tener efectos inesperados, dice. “Uno espera que la combinación quede específca para ratones”.

El por qué de que los virus desarrollados por su grupo no sean contagiosos es un mistrio, dice. No es, por ejemplo, porque el receptor muera más rápido de lo usual, llevándose el virus con él. Pero sus hallazgos podrían explicar por qué los virus de viruela que contienen IL-4 nunca se desarrollaron naturalmente, aún cuando los virus frecuentemente seleccionaron genes que afectaban su inmunidad de receptor.

A pesar de las preocupaciones, el trabajo no letal en nuevos virus de viruela parece continuar en los Estados Unidos. Cuando los miembros de la audiencia en Ginebra cuestionaron la necesidad para tales experimentos, una voz Americana en el fondo se dejó escuchar: “Nueve-Once”. Hubo murmullos de acuerdo.

Fuente: NEW SCIENTIST
Autor: DEBORA MACKENZIE, GINEBRA