El producto Skin-So-Soft de la compañía Avon, recomendada por legiones de señoras, excursionistas, y acampadores como un repelente efectivo contra insectos, fue considerado casi inservible en estudios científicos recientes.El Dr. Mark Fradin de Chapel Hill Dermatology en North Carolina y John Day de la Universidad de Florida cubrieron los brazos de quince voluntarios con diferentes marcas de aerosoles contra insectos. Los investigadores luego calificaron la efectividad de cada tratamiento. Entre los peores: Skin-So-Soft, el cual se encontró que es de muy poca efectividad como repelente contra insectos, ofreciendo menos de una hora de protección. En 1993, Consumer Reports probó Skin-So-Soft y llegó a la misma conclusión.

De acuerdo a un estudio publicado en el New England Journal of Medicine, los aerosoles contra insectos que utilizan el repelente DEET son mucho más efectivos que otros productos. En un comentario al England Journal, los investigadores de la Escuela de Salud Pública de Harvard acordaron que el DEET es mucho menos tóxico de lo que se cree y que los raros problemas asociados con el DEET son usualmente causados por el sobreuso del producto.

En general, cualquier riesgo de usar DEET como se indica es sobrepasado por mucho más por los peligros de las enfermedades que acarrean algunos mosquitos como el Virus del Nilo del Oeste, la malaria, y la encefalitis.

En todo el mundo, solo la malaria mata a unas tres millones de personas cada año.