Una simple prueba de sangre podría ser la primera muestra objetiva de cuánto dolor experimenta una persona, afirma el inventor de la prueba.Si esto es correcto, esta prueba podría indicar el grado de dolor de las personas que no pueden comunicarse como bebés y enfermos que no estén completamente concientes.

Muchos investigadores están escépticos sobre si tal prueba es posible pero el inventor Shaun Kilminster afirma que su prueba ya ha sido demostrada con pacientes con dolores de cabeza.

Su prueba no depende de ningún conocimiento de las bases biológicas del dolor: simplemente mide las cantidades relativas de tres neurotransmisores – las químicas que envían mensajes entre células nerviosas. Por razones comerciales, Kilminster no quiere todavía identificar las químicas que su prueba mide.

En una supuesta investigación sin publicar que involucró a 60 personas, la mitad con dolor de cabeza leve, el análisis identificó exitosamente a todos los hombres con dolor de cabeza y al 93 porciento de las mujeres, dijo.

Algunos científicos todavía no están convencidos. “Yo estoy escéptico de que un análisis de tres neurotransmisores en la sangre pudiera proveer cualquier medida útil”, dice Robert Coghill, un investigador de dolor de la Escuela de Medicina de la Universidad Wake Forest en Winston-Salem, Carolina del Norte.

Y Andrew Moore de la unidad de investigación de dolor en la Universidad de Oxford dice que aún si funcionara para dolores de cabeza, es poco probable que pueda diagnosticar otros tipos de dolores. “Yo predigo que no funcionará”, dice.

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